LOS NIÑOS Y LA CULTURA DE LA ACTIVIDAD FÍSICA EN LA FAMILIA

La evolución del hombre empezó cuando los primeros seres bípedos que caminaron en el planeta, comenzaron a desplazarse en busca de un refugio, agua y comida principalmente, en ese momento no existía ninguna tecnología, ni siquiera un vocabulario en el que estos seres se comunicaban, todo era en relación a sonidos y mucho experimento de ensayo y error y la casualidad como factor principal.

La necesidad de alimentarse hizo que estos seres tuviesen que cambiar de lugar o refugio constantemente, ya que no podían esperar a que apareciera la comida, sino que debían encontrarla, y no solo eso, luego de encontrarla había que cosecharla, si eran frutos, flores u hojas, pero si era carne, debían cazarla, y si la cacería era fallida, deberían buscar nuevamente algo que les diera mayor cantidad de calorías y nutrientes, por lo que podían pasar días en esa nueva búsqueda.

De acuerdo a cada intento fallido, fueron aprendiendo cosas, algunas resultaban y otras no, mejorando cada vez, y siendo más complejas también, ayudándose de rocas, piedras, palos, etc. forjando así que el azar se pusiese de su lado muchas veces, teniendo descubrimientos importantes para la constante supervivencia, ya que estudios científicos no habían, y con cada modificación que hacían en sus sistemas de trabajo, obviamente fallaban mucho, se les caían y rompían frutos, perdían presas, dándose cuenta que cada acción que hacían tenía una consecuencia que podía ser positiva o negativa, lo mismo con la lluvia, los rayos, el viento, el sol, el mar; Todo el entorno influía en el desarrollo de sus actividades.

CAMBIOS FÍSICOS

Este ritmo de vida, fue desarrollando una condición física adecuada a la carga de esfuerzo físico que tenían, principalmente Resistencia, ya que caminaban largos trayectos hasta encontrar un lugar adecuado para pasar la noche, donde hubiese comida y agua alrededor; Velocidad, para atrapar y acorralar a los animales que buscaban cazar; Fuerza, para someter a los animales, levantar troncos y por supuesto sostener su propio peso en momentos de riesgo como colgar de un árbol; Equilibrio, para cruzar por lugares estrechos, desplazarse con pesos importantes, etc.; Esto como adaptación del cuerpo para los esfuerzos más intensos. Al mismo tiempo, desarrollaron habilidades de mayor precisión y menor esfuerzo, pero que eran lo suficientemente importante para disminuir la carga de esfuerzo que requerían inicialmente, como: El sigilo, es una habilidad de gran importancia, ya que gracias a ella, podían tener recompensas valiosas al poder acechar a sus presas y sorprenderlas, minimizando así el esfuerzo de perseguirlas si se escapaban, hacer el sometimiento lo antes posible y reservar energía para el resto de los días; La creación y utilización de instrumentos como herramientas que les ayudaba a cazar, comer, cortar, cosechar, beber, etc.; El lanzamiento, -como arma de cacería- de piedras y después evolucionó un instrumento que lanzaba otro, como el arco y la flecha para la caza o la pesca; El nadar, también fue importante, ya que gracias a ella, no caminaban bordeando un lago o un río buscando llegar al otro lado, además de construir medios de transportes como balsas; O construcciones estáticas como puentes con árboles para cruzar o pequeñas chozas cuando no había refugios naturales.

Hoy en día el esfuerzo que requerimos para alimentarnos, beber, vivir y dormir, no tiene nada que ver con aquellos tiempos. En este siglo XXI con sólo ir a la cocina, podemos comer y beber con el mínimo esfuerzo y tiempo, en 10 minutos ya hicimos lo que en esa época llevaba mediodía quizás, y aún así, las personas se quejan que les falta tiempo; Cada persona tiene actividades y responsabilidades que obligan a usar el tiempo y energía en cosas que quizás no quisiéramos realizar, pero lo importante es hacerse de un tiempo, antes o después de esas actividades para hacer lo que realmente quiero y necesito.

ACTITUD Y EL EJEMPLO

Si nos ponemos un poco más estrictos, la actitud que la persona tiene al hacer lo que tiene que hacer, influirá en el resultado, si se hacen las cosas con un ánimo negativo o pesimista, lo más probable es que eso terminará gestando un mal rato, que se caiga algo, alguna pelea, un accidente, etc. o al contrario si esa actividad se hace con buen ánimo y energía, esa experiencia será más rápida, entretenida y sobrará tiempo; Y todo lo que hagamos es un ejemplo para quien lo mira o comparte esas experiencias, por lo tanto, puede ser que alguien las imite.

Si tienes hijos o niños a tu cargo, serás el ejemplo de cómo reaccionar o hacer cosas en diversas situaciones, y aunque tu no le enseñes, ese niño o niña aprenderá igual, solo por el hecho de verte hacer o no hacer algo, por pelear o no pelear en alguna situación, ayudar o no cuando se necesite, alimentarte bien o comer chatarra, hacer ejercicio o ser sedentario, trabajar contento o amargado, etc.

Lo importante de esta publicación es… si bien en la antigüedad éramos muy activos, se necesitaba esfuerzo para todas las actividades de sobrevivencia, hoy en día es todo lo contrario, con el mínimo esfuerzo tenemos las cosas para vivir bien y más que bien, es más, muchas personas se han enfermado por consecuencia de usar las nuevas tecnologías para todas las cosas de la vida, y aunque suene exagerado, hay personas que van a comprar en auto aunque sea cerca, piden comida por teléfono, compras formato on line, come comida envasada y poco natural, en vez de tomar agua, toma jugos, mira mucho tiempo televisión, usa mucho el celular y computador, trabaja sentado por horas, etc. y sus tiempo libres, no los usa para moverse sanamente, si no que el estrés acumulado en el trabajo y situaciones diarias, ha generado sensación de cansancio constante y por lo tanto, la energía está baja y sin ganas de hacer cosas, más aún quienes tienen sobrepeso, que debido al alto peso que deben movilizar a diario, las articulaciones y ligamentos se sobreesforzarán aún más, aumentando el grado de excusa para no hacer alguna actividad física.

RESPONSABILIDAD Y CONSECUENCIAS

Culturalmente, y en forma casi universal, el estilo de vida sedentario se ha ido estableciendo como parte de una forma normal de vivir, desde la comodidad y la excusa del cansancio, muchas personas de Chile y otros muchos países, han dejado fuera de sus actividades cotidianas y tiempos libres, la actividad física y el deporte, que son las únicas actividades que generan cambios naturales positivos, como: mejorar el estado ánimo, acelerar el metabolismo (asimilar los nutrientes más rápido), desarrollar las capacidades físicas (mejorar la condición física), aumentar el gasto calórico, aumentar la capacidad pulmonar y obviamente mejorar el volumen cardiaco, entre otros. y todo en una misma actividad.

En el mapa nutricional de la Junaeb, 2020. Determinan que 3 de cada 5 niños de 5to básico presenta obesidad o sobrepeso, y que el 54% de los niños de la población pediátrica sufre de obesidad infantil; y el 12% de niños de PreKinder, el 11% en niños de kinder y 10% en niños de 1ro básico, padecen de obesidad severa; Y si esos resultados se extrapolan a nivel nacional, serían unos 200 mil niños ya enfermos, además de algunos casos con prediabetes o diabetes tipo 2, hipertensión arterial, hiperlipidemia e hiperglicemia. Otra investigación (Reporte Global de Notas de Actividad Física en Niños y Adolescentes 2018) nota que 1 de cada 5 niños entre 9 y 11 años es físicamente activo (20% de la población infantil en Chile); También la OECD (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos, 2015), ubica a Chile como uno de los países más obesos de la Organización, donde participan 38 países, y sitúa a un 34,4% de la población chilena con obesidad, es decir, tiene un índice de masa corporal IMC mayor a 30. Esta cifra es 15 puntos porcentuales más alta que el 19,4% del total de los países en estudio.

CONCLUSIÓN

Por eso es importante que los hábitos personales y familiares, sean un aporte para tu salud, la de tu familia y sobre todo la de tus hijos e hijas; Si somos capaces de plantar la semilla de un estilo de vida activo y saludable, la vejez que tenga cada uno será muy agradable y placentera, sabiendo que no serán una carga para los demás y tampoco dependerán físicamente de ellos. Independiente del trabajo que tengan, siempre hay algo que se puede hacer, si no te gusta algún deporte puedes hacer yoga o ejercicios de flexibilidad, eso ayudará a tener unas articulaciones y músculos más móviles, libres del cansancio y estrés acumulado durante el día.

Por lo tanto, depende de ti, que los hábitos que adquiera el niño o niña, sean positivos para su desarrollo y su futuro. Ten en cuenta que la psiquis humana se forma entre los 3 y los 7 años de edad, por lo tanto, todo lo que hagamos, digamos, actuemos, decidamos, pensemos en voz alta y consejos que digamos, formará la forma de hacer, decir, pensar y actuar en los niños, así que piensa muy bien lo que dirás y las cosas que harás, recuerda que tu y quienes estén a cargo de ellos, serán el ejemplo social.

Si eres trabajador de cualquier empresa, busca momentos para realizar alguna actividad física y demuestra que siempre se puede encontrar tiempos para mover sanamente el cuerpo.

Si eres empresario o emprendedor que tiene personas a su cargo, incentiva a tus trabajadores y dales la posibilidad o facilidades para que puedan participar de alguna actividad física, servirá como cultura empresarial, generando motivación y animo positivo dentro y fuera de la empresa.

Cuídate y cuídalos.

Saludos.