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martes, 28 de diciembre de 2021

Nº16. Enfermedades profesionales y la prevención



¿SE PUEDEN PREVENIR LAS ENFERMEDADES PROFESIONALES O LESIONES  LABORALES?




¿Qué es una enfermedad profesional?


Es aquella causada de una manera directa por el ejercicio de la profesión o el trabajo que realiza una persona y que le produzca incapacidad o muerte. Como por ejemplo: silicosis, sordera profesional, túnel carpiano, etc. Como bien dice su nombre, son problemas que sufren los trabajadores en diversas áreas en la salud, tanto física, mental o ambos, y que tienen directa relación con las tareas realizadas en el trabajo, es decir, que el síntoma que siente la persona tiene que ser consecuente al rol que cumple en la empresa y el esfuerzo físico asociado. En el caso de nosotros "PROMOVER", tenemos como especialidad el área musculoesquelética, y tiene relación con padecimientos de músculos fatigados o descompensados, articulaciones doloridas y en los casos más graves, imposibilidad de ejecutar al 100% las tareas laborales.




Como ya hemos dicho en publicaciones anteriores, todas las empresas, por muy diferentes que sean sus rubros, las personas que desempeñan tareas productivas, SIEMPRE estarán expuestos a los factores de riesgo que conllevan las tareas de producción, las que pueden ser livianas o de bajo esfuerzo, o muy extenuantes debido al alto esfuerzo que se necesita.




Es por eso que los denominados, por el minsal, traumatismos músculo-esqueléticos que tienen relación con el trabajo (TMERT), al no ser tratados en forma preventiva, tienen como resultado mayor tiempo de licencias médicas, disminución en la producción, ausentismo laboral e incluso un aumento en la prima del seguro del trabajador si no se han tomado medidas preventivas, de acuerdo al riesgo asociado al esfuerzo demandado por la carga laboral. Por eso, es importante analizar todas las variables del o los puestos de trabajo, para determinar los factores de riesgo a los que están expuestos las y los trabajadores a corto, mediano y largo plazo.




Sin un análisis que determine el nivel de esfuerzo realizado y clasificarlo según su factor de riesgo asociado, cuando la persona se queje de algún dolor, molestia, o simplemente se ausente con alguna licencia médica debido a su problema, recién ahí nos daremos cuenta de lo importante que es prevenir, porque, desde el momento en que el trabajador siente molestias, ya es demasiado tarde para prevenir, ya que eso significa que la LESIÓN ya está presente, es por eso que, conviene acompañar periódicamente a los trabajadores, y realizar evaluaciones que diagnostiquen los factores de riesgo asociados a la actividad.




Hay que tener presente, que evaluar el puesto de trabajo NO ES la única manera de gestionar programas que ayuden a la prevención de lesiones músculo-esquelético en las personas; Existen varios sistemas de trabajo que ayudan a prevenir esta situación, entre ellas tenemos:


-Las conocidas gimnasia de pausa o pausas activas

-Seminarios, capacitaciones y/o talleres

-Evaluaciones diagnósticas preventivas

-Actividades recreativas durante la jornada de trabajo

-Eventos recreativos y deportivos

-Masajes

-etc.




Así como los deportistas, que preparan su cuerpo para el esfuerzo físico que realizarán en sus competencias, todas las personas deberían, por lo menos, realizar un calentamiento previamente a iniciar su actividad laboral, moviendo todo el cuerpo (extremidades superiores, inferiores y tronco), y con mayor conciencia y energía las partes del cuerpo que más esfuerzo hacen al realizar las tareas laborales, cumpliendo las correspondientes etapas:


1. Partir a BAJA INTENSIDAD para activar de a poco las articulaciones;


2. Continuar con ejercicios a MEDIA INTENSIDAD donde el cuerpo comience a moverse en forma un poco más enérgica, logrando elevar la temperatura corporal;


3. Aumentar la actividad con ejercicios a ALTA INTENSIDAD, donde se realizan ejercicios donde se muevan más partes del cuerpo, y a toda velocidad;


y 4. Finalizar el calentamiento y finalizar la jornada laboral con elongaciones o estiramientos musculares que ayuden a alargar las fibras musculares después de tanta contracción durante el día, esto generará un pequeño relajo en la musculatura y las articulaciones.


Esta actividad debe hacerse siempre, ya que tiene por objetivo preparar las articulaciones, músculos y ligamentos para las actividades posteriores, el calentamiento debe durar al menos 5 minutos y generar calor corporal, dando como resultado una movilidad articular más fluida y mayor rango de movimiento con un menor esfuerzo.




Todo esto pensando en que cada parte de nuestro cuerpo, tiene tareas específicas gran parte del día en la jornada de trabajo; Si tomamos en cuenta que estas acciones, que normalmente  las realizamos toda la semana, por muchos meses y con un descanso que no es muy adecuado, sin darnos cuenta, el estrés muscular y articular acumulado desarrollará más temprano que tarde, una condición que a mediano o largo plazo generará una lesión.







CONCLUSIÓN


Si el trabajo es muy intenso y con factores de riesgo graves, lo más probable es que no se prevenga 100% una enfermedad o lesión laboral, pero sí es seguro que esa condición se desplace en el tiempo, es decir, que si no se tomaran medidas preventivas, esa lesión o enfermedad llegará en un corto tiempo de trabajo, pero con una gestión de prevención este problema puede que se desplace por años y a menor gravedad o intensidad, por eso es normal que en rubros con factores de riesgo alto, haya mucha rotación de trabajadores.




De hecho, la rotación de trabajadores es una forma de prevención, aunque vale decir, que esa rotación debiese ser dentro de la propia empresa, y que en los puestos de trabajo con factores de riesgos más altos, haya varias personas capacitadas para realizar esa tarea, y cada cierto tiempo, esos trabajadores roten por ese puesto, mientras la persona que estuvo anteriormente tiene tiempo de recuperación; Así se desplazarán aún más los riesgos que puedan sufrir los trabajadores, los que finalmente son, quienes ayudan con la producción y cumplimiento de objetivos.




Por lo tanto, la respuesta es que si, si se pueden prevenir, con una adecuada organización, coordinación y constantes capacitaciones, podemos llegar a formar una empresa que minimice al máximo los factores de riesgo de desarrollar enfermedades o lesiones laborales que están relacionadas con el trabajo.




Si te interesa analizar tu puesto de trabajo o los puestos de trabajo que tienes en tu empresa o emprendimiento, contáctate con este enlace a un formulario con 3 preguntas que necesitamos saber previamente antes de ayudarte a evaluar los factores de riesgo encontrados.




Saludos.



Fuentes.

Mutual de Seguridad

Ley 16.744




www.promover.cl

promover@promover.cl


97 562 88 64

martes, 21 de diciembre de 2021

Nº15. Similitudes y diferencias entre actividades que realiza una persona trabajadora y un deportista


 

COMPAREMOS A UN TRABAJADOR CON UN DEPORTISTA


Sería impensado hacer esta comparación: Un Deportista y Un Trabajador!!!

  • ¿Tienen alguna relación?
  • ¿Son equiparables las actividades de uno con las del otro?



La relación no es equiparable en el sentido físico del rendimiento que pensamos. Si hacemos una carrera entre ambas personas, obviamente el deportista ganará, o tendrá más fuerza. Lo que relacionaremos acá, es la preparación que tienen los deportistas para cumplir sus objetivos deportivos con la forma en que una persona trabajadora "se prepara físicamente" a la hora de cumplir los objetivos de su trabajo, es decir, sus objetivos laborales.




Si nos vamos a lo grueso del asunto, TODA actividad tiene un esfuerzo físico característico, un deportista y su esfuerzo físico es evidente, pero una persona que trabaja en cualquier puesto de trabajo, TAMBIÉN lo tiene, aunque sea mínimo, por ejemplo: un chofer de bus, está sentado gran parte del día, pero ha necesitado, de sus extremidades superiores para poder manejar, por lo tanto, sus hombros tuvieron un esfuerzo importante y constante a la hora de mantener esa posición; Sus extremidades inferiores, también hicieron su parte, presionar los pedales en todo el transcurso del viaje, sobretodo el acelerador, y aunque los movimientos son mínimos, igualmente generan un esfuerzo físico; Y la columna vertebral, que es la parte del cuerpo con menos movimiento o casi nulo, igualmente demanda un esfuerzo físico y es principalmente de mantención de la postura ¿de qué manera? primero, al mantener la cabeza mirando siempre al frente y ocasionalmente hacia los lados, segundo, mantener la espalda recta y alineada con el asiento para poder tener la posición adecuada para el movimiento y posición de las extremidades superiores al conducir, y tercero, la posición de sentado, esta acción la ejecuta la espalda baja o columna lumbar, y es de gran importancia, ya que de acuerdo la forma en que el chofer se siente, es la forma en que se alinearán las demás partes del cuerpo, por lo tanto, si el chofer esta mal sentado, la espalda y el cuello, deberán adoptar posiciones que generen esfuerzos más demandantes.




Entonces, si volvemos a la comparación entre una persona trabajadora -independiente de la actividad que haga- y un deportista de cualquier especialidad olímpica, tienen por tan sólo participar en esa actividad, un esfuerzo físico propio.

  • Esta comparación es de acuerdo a la preparación consciente del cuerpo para la futura ejecución de las tareas laborales.


Un deportista ¿En qué momento hace su mayor esfuerzo? La primera respuesta que se nos viene a la cabeza sería que cuando compite, verdad; y un trabajador, ¿Cuándo hace su mayor esfuerzo físico? aquí uno diría que cuando está trabajando, entonces, ahora hacemos la pregunta que nos ordena un poco la razón por la que hacemos esta comparación ¿Cuál de los dos realiza su mayor esfuerzo por más tiempo? acá debemos tomar en cuenta lo que dura la competencia y el tiempo en la jornada laboral de quien trabaja, ya que lo hace por 5 días a la semana y por las horas correspondientes semanalmente.




Esto nos hace pensar que, si un deportista hace su mayor esfuerzo a la hora de competir -teniendo en cuenta que hay competencias que duran menos de 10 segundos, como los 100 mtrs planos, otros que duran horas como el triatlón y otras que pueden durar días como una expedición a la montaña- sus horas de ENTRENAMIENTO son la forma de prepararse para hacer el máximo esfuerzo en la competición, aunque éste debe ser igual o más fuerte a veces, ya que no puede ser, que al momento de la competencia, recién ahí se haga el esfuerzo mayor, es por eso que el entrenamiento tiene tanta importancia, debe ser metódico y constante, donde todas las posibilidades competitivas se trabajan en ese momento, es decir, antes de las competencias; y que al llegar la hora de competir, el esfuerzo que se haga ahí, el cuerpo ya lo haya trabajado y no termine sobre esforzándose durante la competencia.




A diferencia, en el estilo de vida de una persona trabajadora -tomando en cuenta que al menos el 70% de las personas tienen un estilo de vida sedentario- podemos inferir que esas personas, no realizan actividades que puedan fortalecer o preparar su cuerpo para las actividades diarias de su jornada laboral, por lo tanto, si bien, cada actividad es totalmente diferente, como características, esfuerzos y obviamente intensidades, igualmente tienen algo en común, un esfuerzo particular utilizando partes del cuerpo y su gran diferencia está en que uno PREPARA su cuerpo para el desarrollo de la tarea y el otro NO HACE ningún tipo de preparación física para el esfuerzo que conlleva la tarea laboral.




Es por esta razón que es importante, considerar realizar alguna actividad física que permita a las articulaciones y músculos, tener movimiento, desarrollarse o mantener una condición física adecuada, donde se logre generar un trabajo metabólico y un gasto calórico que sea adecuado para que todos los sistemas del cuerpo se beneficien con la o las actividades. Recuerda que el cuerpo, desde la era prehistórica ha tenido la función de moverse, ya que sin eso, la evolución hubiese sido imposible; Hoy en día la tecnología ha alivianado tanto las cosas, que hay personas que creen que no necesitan moverse, pero la realidad es que DEBEMOS comprometernos con la salud y tomar la decisión de, sin tener la necesidad física de movernos, encontrar un momento para que nuestro cuerpo se mueva y genere los cambios que cada uno de nosotros necesita para tener un estilo de vida saludable y que sea compatible con la familia, gustos, hobbies y también con el área laboral, ya que el conjunto de todo lo anterior, permite que nuestro sentir diario sea positivo o negativo.




CONCLUSIÓN

Esta comparación fue más bien para darnos cuenta de la gran diferencia que hay entre cada actividad, pero si piensas bien, en tu trabajo o en otros que hayas estado, o si le preguntas a alguien del suyo, siempre se da que quienes tienen un estilo de vida más activo, que va al gimnasio, se desplaza en bicicleta, sale a trotar, sube cerros los fines de semana o tiene partidos en forma constante, su relación entre salud y trabajo, siempre es positiva, tiene mejor ánimo, más relajado, menos dolores musculares, mejor postura, etc. Es decir, que la actividad física se ha vuelto un factor PREVENTIVO ante las lesiones y enfermedades por causa laboral.




Te invito a que analices tu semana, tu estilo de vida, el esfuerzo que te demanda tu tipo de trabajo, tu ánimo y por sobre todo tus molestias físicas, ya que con esta información, tendrás una base para pensar que cosas puedes hacer, lo importante en encontrar actividades que estén alineadas con las cosas que te gustan y te den ganas de hacerlas y no realizarlas por obligación, porque la obligación mata cualquier tipo de iniciativa diferente a lo que ya estés acostumbrado o acostumbrada a hacer.




No tienes que entrenar como un deportista de alto rendimiento para ser un super trabajador, pero si eres activo y mantienes tu cuerpo fuerte y saludable, las lesiones o enfermedades laborales las alejaras e incluso puedes eliminarlas de tu futuro laboral.




Saludos.





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